Etapa 2
Miércoles 29 de Mayo 2019 Saliendo del
municipio de Sabadell y la moto va y no arranca…
Varios intentos y… por fin suena ese sonido que te llena
de fuerza el corazón, la moto arranca.
Ya en camino decido parar a sacar efectivo del cajero,
hasta aquí todo bien.. la virgen, otra vez?.. la moto
hace por arrancar hasta que suena eso de carrac, carrac…
la puñetera va y se queda en dique seco, vamos, que las
cosas no podían ir peor, la moto cargada hasta los topes
y pensando en desmontar todo por si tengo que cambiar la
batería.
A esto que un viandante se me acerca y me dice, por esa
calle más arriba, hay un taller de motos, mira a ver.
Dicho y hecho, el menda se apea de la moto y acera a
riba y con os cueros puestos, les doy la voz de AUSILIO..
Miran la moto desde la puerta del taller y me saltan,
¿la puedes acercar?... en fin, aquí se me cae toda la
camaradería al sub suelo.
Pues nada, móntate y empujara como bien puedas en
dirección contraria.
Ya en la puerta y mirando para aparcarla, se me corre y
le pego al botón de arranque.. COÑOOOOO…
ARRANCAAAAAAAAAAA……..
Pues eso, con las mismas y con mis respetos, me despido
y palante….
*Me pregunto yo, ¿Por qué me ha sucedido esto?,, ¿va a
ser de los conectores que instalé a la batería con
puertos para cargar baterías?…. No creo, si no deja de
ser unos cables positivo y negativo, que hasta que no lo
enchufes, no hay consumo…..
Pero como la duda seguía en mi cabeza, decido acercarme
a Honda Sabadell, buena gente la cual días antes me
pusieron neumáticos a la moto…
Aquí coincidimos en hacer un corto a ambos cables para
quitarnos de sorpresas…
Aun a día de hoy, sin hacer.
El viaje un verdadero calvario, desde la Junquera hasta
Marsella, un viento mortal, par que os hagáis una idea,
este primer día haría unos 350 klms y tarde nueve
horitas en llegar al destino….
Decido coger un alojamiento, ya que el viento me echaría
a perder la acampada, y eso sí que no.
Lo que tiene no conocer los idiomas, casi me quedo en la
calle. Problemillas con la entrada.
Tanto Perpiñán, Montpellier y Marsella, tras recorrer
sus calles, no encontré donde comprar el preciado
parche.
Jueves 30 de Mayo
La noche del 30, mira por donde caigo en un bar
restaurante regentado por moteros…
Tras unas charlas en francés, inglés, italiano y mi
castellano, no llegamos a ningún lado.
Suerte que en la barra un motero agarrando su cerveza va
y comienza a traducirnos, SALVADO, TENGO SOLUCIÓN.
Llegamos al ofrecimiento por parte de los dueños del
local, de dejarme acampar frente al bar, en un prado
bien hermoso, en el cual bien se podría organizar un
buen evento motero.
Más y mejor no podía pedir.
Una vez resuelto el tema de la pernocta y plantada la
tienda, me dispongo a hacer una cena en condiciones,
lugar donde estoy escribiendo, y como ya son las 23:13,
este se va a la piltra.
Viernes 31 mayo
Si el paraje era hermoso el día anterior, esta mañana lo
era aun más.
Mientras remoloneaba en la tienda, la madre naturaleza
me decía, tío espabila, que hay ganas….
Nada, claro que hice caso y me dirigí al restaurante de
los dueños del prado a desayunar.
Aquí parece que el café lo ponen cortito, pero como no,
entre señales me hice entender y el café llegó a la
mitad de la taza. Perfecto…
Ya a la despedida, me puse a recoger el campamento, un
lugar realmente hermoso..
Arrancando motores dirección Génova, un montón de klms
que en esta ocasión me dio pal pelo.
Ganas de llegar y descansar.
Pero antes de esto, contaros que pasé por uno de los
lugares más hermosos por los que he conducido, LOS ALPES
FRANCESES.
A la subida del puerto Colle Della Maddalena - Argentera
y en la cumbre, hay un Refugio Della Pace, lleno de
motos, pues tocaba parar y hacer contactos.
(Algo se hizo, pero no lo que yo contaba encontrar). Ya
no quedan de la vieja escuela.
Pues nada, ya parados tocaba comer algo, un plato típico
realmente sugerente, con base de pasta, salchichas y
carne de vaca, con un caldo de esos que llevan mas grasa
que aceite. ¿Os podéis creer que no me lo pude
terminar?..
Cafelito y al lio...